Objetivos infames

  

 

 

 

 

 Por Dmitry Orlov – El 16 octobre 2020 – Fuente Club Orlov

  Supongamos que eres uno de los genios malvados que dirigen la economía mundial. Por supuesto, usted querría seguir gestionándolo de manera estable, segura y rentable a pesar de los problemas que puedan surgir de vez en cuando. Querrás resolver estos problemas rápida y eficientemente sin llamar la atención sobre ti mismo y tus malos hábitos. Entonces, ¿cuáles son los principales problemas que deben ser resueltos de manera rápida y preventiva, y cómo deben ser resueltos?

En primer lugar, encontrará que hay un gran problema con el suministro de energía mundial. Esto se ha predicho una y otra vez desde mediados de los años 90, pero diversos avances tecnológicos y maniobras geopolíticas han hecho retroceder la crisis final dos décadas. Sin embargo, hoy en día, la crisis final está cada vez más cerca. Los nuevos descubrimientos de recursos han quedado tan atrasados con respecto a la producción, que no hay esperanza de que alguna vez se pongan al día. La última gran esperanza para los Estados Unidos y el mundo, la fractura hidráulica, está ahora en bancarrota, sin haber obtenido nunca muchos beneficios. La mayoría de las empresas involucradas han quebrado o están a punto de hacerlo. Las energías renovables, en forma de energía eólica y solar, han demostrado ser demasiado caras y poco atractivas para las redes eléctricas debido a su intermitencia y a la incapacidad de almacenar grandes cantidades de electricidad. Las maniobras geopolíticas, como el intento de derrocar al gobierno venezolano y robar su petróleo, o de sancionar a Rusia por comportarse como una gasolinera con una economía destrozada, han fracasado. La tasa de rendimiento energético -una medida difícil de calcular pero en última instancia decisiva para la viabilidad de cualquier empresa energética- sigue disminuyendo.

Como un genio malvado y no sólo un ignorante piloto aficionado en su silla de ruedas, sería plenamente consciente de que si no se hace algo para equilibrar la oferta y la demanda de combustibles fósiles, la economía mundial se colapsará. Desde el advenimiento de la industrialización basada en el carbón, el crecimiento económico siempre ha ido acompañado de un aumento proporcional del uso de combustibles fósiles. Pero tales aumentos ahora parecen imposibles. La economía mundial actual depende del crédito para sostener la producción, y del crecimiento continuo para mantenerse solvente. En esta pauta, la única alternativa al crecimiento económico continuado es el colapso económico. Así que estamos empezando a buscar formas de reequilibrar la ecuación de la energía cerrando algunas partes de la economía mundial mientras que se permite que otras continúen creciendo. Como nadie está particularmente ansioso por ir al matadero, su tarea es encontrar la manera de engañarlos para que vayan voluntariamente, supuestamente por su propio bien.

La siguiente pregunta que hay que hacer es qué naciones industrializadas están listas para el colmillo de carnicero. Verá que algunos países han vivido continuamente por encima de sus posibilidades. Han pedido prestado dinero continuamente mucho más allá de su potencial de crecimiento económico, y su capacidad para pagar las deudas que ahora contraen es precisamente cero. El más grande de ellos es el de los Estados Unidos, que ha estado viviendo de dinero prestado durante décadas y cuya enorme deuda empequeñece todos los excesos anteriores juntos. Esto, combinado con la pérdida gradual de la condición de moneda de reserva del dólar estadounidense y la pérdida concomitante por parte de los Estados Unidos del exorbitante privilegio de imprimir dinero según lo necesite, ha colocado a los Estados Unidos en el epicentro del inevitable colapso financiero. Usted interpretaría el pánico del mercado REPO de agosto de 2019, cuando los intereses de los préstamos cotidianos que utilizaban la deuda federal de los Estados Unidos como garantía alcanzaron el 10%, como una grieta en la fachada de la cuidada aldea de Potemkin del sistema financiero de los Estados Unidos.

Si observamos la situación fiscal de los Estados Unidos, ya no se puede decir que los Estados Unidos ya no pueden financiar sus crecientes déficits presupuestarios pidiendo prestado al extranjero, ya que los extranjeros son ahora vendedores netos de títulos de deuda de los Estados Unidos. Le sorprenderá descubrir que el gobierno de los Estados Unidos está pidiendo prestado casi la mitad de sus gastos, acumulando una deuda a corto plazo al doble de la tasa que podría esperar pagarla, y planeando con indiferencia endeudarse aún más a corto plazo y pedir más préstamos en los años venideros. La imagen que me viene a la mente es la de un toro particularmente terco parado en medio delas vías de tren tratando de desafiar con sus ojos a un tren que viene en dirección contraria.

Como genio financiero, sabes todo lo que hay que saber sobre los esquemas piramidales y fácilmente identificas el estado actual de las cosas como un puro esquema piramidal. Dado que todos los esquemas piramidales fallan, y tienden a hacerlo más o menos instantáneamente, se empieza a buscar una manera de anticipar su colapso para mantener el control de la situación. Su principal objetivo a corto plazo sería evitar el pánico sumiendo a la economía mundial en una especie de coma inducido médicamente, alimentándola con una infusión de dinero gratis. Esta pausa le daría la oportunidad de hacer algunos cambios necesarios, algunos cosméticos, algunos más dramáticos.

No habrá suficiente energía para hacer funcionar la economía industrial global, por lo que algunas partes de ella tienen que ser cerradas. ¿Qué partes? Es poco probable que un enfoque ad hoc y a la carta sea eficaz porque lo que queda de la economía mundial al final de este proceso debe estar intacto, ser contiguo, estable, próspero y bastante grande, abarcando, digamos, dos o tres mil millones de almas de un total totalmente superfluo de más de 7.500 millones, la mitad de los cuales ya se dice que subsisten con menos de un mítico dólar al día. El empobrecido Sur no es claramente un problema del que tú, el genio malvado que gobierna el mundo, debas preocuparte. Esta gente ya se las arregla de una manera u otra. No son realmente parte de la economía global.

Entonces, ¿qué partes de la economía mundial debería cerrar? Una excelente oportunidad, de la que se dispone inmediatamente por el miedo artificialmente exagerado a la pandemia, es matar el turismo internacional. Esto es lo que se ha hecho: las industrias hotelera y aérea están devastadas, al igual que los restaurantes, los spas y muchos otros negocios que reciben turistas internacionales. Los cruceros están siendo desmantelados para ser desguazados. Esto ha reducido el consumo de destilados de petróleo. A diferencia de la gasolina, que es útil para viajar sin rumbo en pequeños vehículos de pasajeros y es en gran medida un producto de desecho creado por las refinerías de petróleo, los destilados de petróleo como el queroseno, el combustible para búnkeres y el gasóleo son el alma de la economía mundial. Su uso para transportar a los turistas en avión a los destinos de vacaciones es un gran desperdicio, inasequible. 

 Pero mientras que el uso de los destilados de petróleo está disminuyendo, también lo está el uso de la gasolina, que representa alrededor de la mitad de lo que cada barril de petróleo crudo puede refinar. La solución es evitar que los trabajadores se desplacen al trabajo haciéndolos trabajar desde casa. Es un puro desperdicio proporcionar a los oficinistas un lugar para dormir y jugar y otro para trabajar; pueden hacer todo desde el mismo colchón y la misma conexión a Internet utilizando el mismo ordenador portátil y el mismo teléfono móvil. Una vez que no hay necesidad de viajar, también desaparece la necesidad de mantener oficinas en las grandes ciudades y las ciudades y suburbios pueden despoblarse. La gente puede teletrabajar fácilmente desde el campo. La necesidad de conducir hasta el supermercado puede ser reemplazada por un camión de reparto semanal, lo que permite a la mayoría de los negocios minoristas cerrar también. En un entorno rural, se puede enseñar a la gente a cultivar y producir sus propios alimentos, a calentarse con la leña que recogen y, finalmente, a volverse semisalvajes y desaparecer de la vista.

Una vez que ya no es necesario desplazarse y conducir hasta las tiendas, es posible reducir la movilidad general de la población, lo que reduce aún más el consumo de energía. La mejor manera de lograrlo es eliminar el transporte privado de larga distancia mediante la introducción de peajes muy elevados en las autopistas y, al mismo tiempo, introducir normas estrictas que deben respetarse antes de permitir que los pasajeros suban a los transportes públicos, los trenes o los aviones. Las medidas de salud pública y seguridad pueden desempeñar un papel importante a este respecto.

Un loable efecto secundario de la dispersión de la población en el campo y al mismo tiempo la limitación de su movilidad es que la protesta política se vuelve inútil. Una vez que la gente ya no puede reunirse y protestar en masa, sus movimientos de protesta se vuelven virtuales y se limitan a las plataformas de medios sociales que, al ser privadas, pueden ser simplemente cerradas. Cuando las autoridades necesitan intervenir, pueden vigilar fácilmente el tráfico telefónico y de Internet y restringir los movimientos físicos de cualquier persona que consideren sospechosa. Esto reduce significativamente los costos de la vigilancia, la dispersión de las manifestaciones y la sofocación de los disturbios. Un primer paso útil es dejar de hacer policía en las grandes ciudades como primer paso, permitiendo que los criminales y los saqueadores gobiernen libremente y causando así un éxodo perfectamente voluntario de las ciudades al campo.

Otro efecto secundario encomiable del colapso de las grandes ciudades bajo el peso de las olas de crímenes, protestas y disturbios es que los criminales, manifestantes y alborotadores pueden entonces ser acorralados, arrestados y utilizados como esclavos. La vigilancia electrónica contemporánea, con el rastreo de teléfonos móviles, la vigilancia por vídeo y el reconocimiento facial basado en la inteligencia artificial, facilita la identificación y la localización de los autores. Especialmente en los Estados Unidos, donde la esclavitud sigue siendo legal siempre que un tribunal dicte una sentencia por un delito específico (como se establece en la 13ª Enmienda de la Constitución) y donde masas de esclavos negros y latinos trabajan duro en prisiones privatizadas que son bastante similares a las plantaciones de antes de la guerra en el Sur, es una técnica poderosa para convertir el excedente de población en mano de obra gratuita.

 Una importante fuente de gasto energético se dedica a lo que puede definirse como un lujo. En una economía de libre mercado, la elección de los consumidores es sagrada y un gran número de empresas se ocupan de todo, desde salones de uñas hasta el aseo de perros, bares, pubs, restaurantes, servicios de catering, estudios de masaje y yoga, ropa de diseño, etc. Ninguno de estos negocios son esenciales y por lo tanto pueden cerrarse si hay una excusa de seguridad pública para hacerlo. Como alternativa a todo lo anterior, una cesta de bienes de consumo esenciales puede ser entregada a los hogares, de forma gratuita y regular, por equipos de voluntarios de la comunidad fuertemente armados.

Normalmente, se esperaría que la propuesta de sumir a la economía mundial en un coma inducido médicamente encontrara una resistencia considerable. Su brillante solución es asustar a todos para que se sometan abogando repetidamente por un virus respiratorio no particularmente peligroso. Según las últimas estimaciones, probablemente todavía demasiado altas, de la Organización Mundial de la Salud, el nuevo SARS-CoV-2 tiene una tasa de mortalidad por infección (IFR) de sólo el 0,14%. Esta tasa es significativamente más alta que el 0,10% de la última gran pandemia viral respiratoria, la gripe de Hong Kong de 1968-69, que mató entre 1 y 4 millones de personas en todo el mundo y puede haber contribuido en cierta medida a la caída del 0,6% del PIB de los EE.UU. (aunque esta caída se debe principalmente al fin de los gastos relacionados con la guerra de Vietnam). Pero como la tasa de infección del nuevo virus tiende a ser seriamente subestimada (lo cual es difícil porque no causa síntomas en la mayoría de las personas), es probable que la cifra final de RFI sea mucho más baja.

Como empezamos a saber, un cierto descrédito de los alarmistas se hace inevitable. Pero hasta ahora, la misión de las élites que fomentan el miedo ha sido un gran éxito. Las predicciones alarmistas de millones de muertes basadas en un falso modelo informático ideado por Neil Ferguson, antiguo físico teórico del Colegio Imperial de Inglaterra (cuyas predicciones durante muchos años han sido tan erróneas como el día es largo), combinadas con el habitual circo y alboroto, y el frenesí por el brote inicial en China, han llevado a los gobiernos de todo el mundo a reaccionar de forma exagerada, cerrando grandes partes de sus economías.

Las personas más inteligentes ya han reunido un gran número de hechos que son muy perjudiciales para el bombo: que tratar de detener la propagación del virus fue una locura; que el daño causado por las medidas de emergencia es mucho más grave que el causado por el propio virus; que el virus es un inoculante seguro y eficaz contra sí mismo, que evita la necesidad de vacunas. 

 Pero nada de esto importa: el coma económico global ha sido inducido como se predijo y sólo las naciones y economías más prometedoras y estables saldrán de él. Este descanso le dará a usted, el genio malvado a cargo de la economía global, una oportunidad de resolver algunos problemas importantes, como

    Longevidad: Abordar el problema del hacinamiento de los jubilados, ya que los fondos de pensiones estarán vacíos y no habrá recursos para dedicar a la medicina geriátrica.
    Automatización: reducir la intensidad energética de la economía volviendo a la mano de obra, manteniendo un estricto control sobre la fuerza de trabajo
    Inteligencia: trasladar las funciones intelectuales del cerebro humano a servidores de Internet que ejecutan algoritmos de inteligencia artificial, al tiempo que se reforman los sistemas de educación pública para apartarlos del desarrollo intelectual para enseñar habilidades manuales como pulsar botones y obedecer.
    Tratar el problema de los "monos con granadas en sus manos": librar a las naciones anteriormente desarrolladas e industrializadas, pero ahora colapsadas, de algunas armas muy peligrosas, incluyendo las armas nucleares, para evitar que se lastimen a sí mismos y a los demás.
    Reorganizar: reconectar las cadenas de suministro ahora interrumpidas permanentemente en nuevas asociaciones industriales que incluyan sólo a los países y regiones que sigan siendo económicamente viables al menos durante los próximos decenios, desconectando el resto permanentemente.

Abordaremos estos temas en futuros artículos. Mientras tanto, aproveche su coma económico inducido médicamente, y si alguien le pregunta por qué es necesario todo esto, dígale que es por el horrible coronavirus y que no tiene nada que ver con cosas como la burbuja financiera estadounidense a punto de estallar o la bancarrota de la industria de fracturas de los Estados Unidos (que, por cierto, ciertamente lo hace).

  Dmitry Orlov

 

Comentario del administrador.

 Como ven se trata de una lección magistral sobre la destrucción de la demanda a nivel mundial que conlleva la clásica maldición de.

 Quienes cambian libertad por seguridad, no tendrán ni lo uno ni lo otro.