El circo español.
Roma supo torear bastante bien al populacho mediante la política de pan y circo gratis. Hoy hemos avanzado tanto que el pan está adulterado y es de pésima calidad y el circo es de pago. A esto se le llama progreso. No es de extrañar, por ende, que un sector de la ciudadanía se enfade, no por falta de pan que siempre tienen en casa de familiares o amigos, sino por la imposibilidad de pagarlo de su propio bolsillo al tener cerradas las puertas del mercado laboral por voladura controlada de la economía española, así como por el cansancio, hastío, hartazgo, empacho y asco del circo post franquista que llevamos padeciendo desde 1.977 infectado hasta el tuétano del pasado fascista.
He escrito en varias entradas que España no es una democracia, y no lo es porque de entrada la constitución (sic) fue un apaño de cuatro gatos entre los que había un general franquista y supuestos representantes de unos partidos políticos sin ningún peso en una sociedad prácticamente acojonada por cuarenta años de dictadura, y no como debió ser: abriendo un periodo constituyente.
De este modo le metieron a coces al pueblo español una monarquía por la gracia de Franco y una constitución con demasiados conservantes y colorantes y sin nada de sustancia democrática, que nadie conoce, ni ha leído y, como ocurre con casi todas las constituciones, no se cumple y que torea a la soberanía popular secuestrándola y regalándola a los partidos políticos, cuyos jefes, auténticos reyezuelos actúan como tales pisoteando la voluntad popular una vez "legitimados" por la cuota de poder otorgada por los votos prostituidos por la ley D'Hont. Leer.
Por desgracia en España hay demasiada ignorancia, poca cabeza y mucha visceralidad, soberbia y prepotencia. No es esta la mejor combinación para enfrentarnos al colapso social al que estamos asistiendo sin casi enterarnos. Por mi parte como tengo por costumbre me niego a votar en unas elecciones fraudulentas. Allá cada cual.
En cualquier caso se masca la tragedia en el ambiente. Cinco millones de parados y un paro juvenil de prácticamente el 50% es una auténtica vergüenza para un país civilizado, y eso se paga.
De momento España está perdiendo a la carrera su capital más valioso. Más que fuga de cerebros se trata de una estampida, mientras el país se nos llena de mano de obra sin cualificar y sin trabajo...
La crisis detona una ‘fuga de cerebros’ en España
http://www.swissinfo.ch/spa/detail/index.html?the...
10 de junio de 2010 - 08:57
La crisis detona una ‘fuga de cerebros’ en España
Adecco, el gigante suizo de los recursos humanos,
revela que en dos años cerca de 120.000 españoles
han abandonado su tierra en busca de nuevos
horizontes laborales.
Son jóvenes altamente cualificados -médicos, biólogos,
arquitectos o informáticos- que intentan escapar al paro,
obtener un salario atractivo y fincar un equilibrio entre
vida y trabajo.
Un total de 1 millón 333.693 españoles viven fuera de su
país, según el Censo Electoral de Españoles Residentes en
el Extranjero (CERA).
Muchos médicos y enfermeros españoles
buscan trabajo fuera del país. (Keystone)
Y el éxodo se ha intensificado durante los últimos dos
años, que coinciden con la cima de la crisis de los
‘subprime y la tímida recuperación de la economía mundial, para sumar 118.145 casos, un 9,2% más
que en abril de 2008.
El fenómeno comienza a inquietar a los demógrafos, pero también a los expertos en recursos humanos,
que identifican en esta tendencia una nueva oleada de ‘fuga de cerebros’. Y es que el número de
demandantes de empleo para trabajar en el extranjero se duplicó entre abril de 2008 y el mismo mes de
2010.
Los españoles que abandonan su tierra en el siglo XXI poco tienen que ver con el perfil de sus abuelos,
una generación que también protagonizó una importante oleada migratoria.
Hoy, quienes hacen maletas son investigadores, médicos, biólogos, ingenieros, arquitectos o informáticos,
entre otros profesionales.
He escrito en varias entradas que España no es una democracia, y no lo es porque de entrada la constitución (sic) fue un apaño de cuatro gatos entre los que había un general franquista y supuestos representantes de unos partidos políticos sin ningún peso en una sociedad prácticamente acojonada por cuarenta años de dictadura, y no como debió ser: abriendo un periodo constituyente.
De este modo le metieron a coces al pueblo español una monarquía por la gracia de Franco y una constitución con demasiados conservantes y colorantes y sin nada de sustancia democrática, que nadie conoce, ni ha leído y, como ocurre con casi todas las constituciones, no se cumple y que torea a la soberanía popular secuestrándola y regalándola a los partidos políticos, cuyos jefes, auténticos reyezuelos actúan como tales pisoteando la voluntad popular una vez "legitimados" por la cuota de poder otorgada por los votos prostituidos por la ley D'Hont. Leer.
Por desgracia en España hay demasiada ignorancia, poca cabeza y mucha visceralidad, soberbia y prepotencia. No es esta la mejor combinación para enfrentarnos al colapso social al que estamos asistiendo sin casi enterarnos. Por mi parte como tengo por costumbre me niego a votar en unas elecciones fraudulentas. Allá cada cual.
En cualquier caso se masca la tragedia en el ambiente. Cinco millones de parados y un paro juvenil de prácticamente el 50% es una auténtica vergüenza para un país civilizado, y eso se paga.
De momento España está perdiendo a la carrera su capital más valioso. Más que fuga de cerebros se trata de una estampida, mientras el país se nos llena de mano de obra sin cualificar y sin trabajo...
La crisis detona una ‘fuga de cerebros’ en España
http://www.swissinfo.ch/spa/detail/index.html?the...
10 de junio de 2010 - 08:57
La crisis detona una ‘fuga de cerebros’ en España
Adecco, el gigante suizo de los recursos humanos,
revela que en dos años cerca de 120.000 españoles
han abandonado su tierra en busca de nuevos
horizontes laborales.
Son jóvenes altamente cualificados -médicos, biólogos,
arquitectos o informáticos- que intentan escapar al paro,
obtener un salario atractivo y fincar un equilibrio entre
vida y trabajo.
Un total de 1 millón 333.693 españoles viven fuera de su
país, según el Censo Electoral de Españoles Residentes en
el Extranjero (CERA).
Muchos médicos y enfermeros españoles
buscan trabajo fuera del país. (Keystone)
Y el éxodo se ha intensificado durante los últimos dos
años, que coinciden con la cima de la crisis de los
‘subprime y la tímida recuperación de la economía mundial, para sumar 118.145 casos, un 9,2% más
que en abril de 2008.
El fenómeno comienza a inquietar a los demógrafos, pero también a los expertos en recursos humanos,
que identifican en esta tendencia una nueva oleada de ‘fuga de cerebros’. Y es que el número de
demandantes de empleo para trabajar en el extranjero se duplicó entre abril de 2008 y el mismo mes de
2010.
Los españoles que abandonan su tierra en el siglo XXI poco tienen que ver con el perfil de sus abuelos,
una generación que también protagonizó una importante oleada migratoria.
Hoy, quienes hacen maletas son investigadores, médicos, biólogos, ingenieros, arquitectos o informáticos,
entre otros profesionales.
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